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#NomiRecomienda: El terror argentino en «Aterrados» de Demián Rugna

Bienvenidos y bienvenidas a la décima edición de #NomiRecomienda. El espacio en el que todos los viernes les recomendamos que peli o serie ver el fin de semana, o cuando se tenga tiempo para hacerlo. Si en algún momento no sabes que ver, simplemente buscá en instagram o en el buscador de nuestra web #NomiRecomienda y encontrarás las recomendaciones que hemos hecho a lo largo de las semanas.

Lo que tenés que saber

Llegó octubre y de manera consciente o inconsciente todos de a poquito vamos metiéndonos en el género del terror, ya sea leyendo un libro, pasando el Resident Evil 2 por octava ocasión o viendo una peli a las 3 de la mañana con la luz apagada. Si ya son las 3 de la mañana, apagaste la luz, abriste Netflix, busca Aterrados, una película argentina del 2018 escrita, dirigida y musicalizada por Demián Rugna. Se trata de su cuarto largometraje, está protagonizada por Maximiliano Ghione, Norbert Gonzalo, Elvira Onetto, Demian Salomón y Agustín Rittano. Cuenta la historia de unos extraños y terroríficos sucesos que ocurren en tres casas vecinas de un barrio del conurbano. Un policía a punto de retirarse, un forense retirado y dos expertos en lo paranormal deberán unir fuerzas para investigar e intentar esclarecer lo que sucede. Es una premisa un tanto trillada, pero lo asombroso de esta película no es la historia que cuenta en sí, sino el cómo se la cuenta.

El cine de terror se ha revitalizado en los últimos años, pero sigue presente cierto estigma para las películas del género, quizás por esto es que Aterrados pasó desapercibida para muchos en su estreno, a pesar de haber contado con buenas críticas y ser un éxito en los festivales donde fue presentada. Si te la perdiste en su estreno en las salas, ahora podes verla a través de Netflix.

Por que tenés que verla: Una película de terror enfocada en aterrorizarte

Cómo se había dicho antes, la historia de Aterrados es una que ya se ha visto antes, pero que está contada con una gran eficacia. Es una película consciente de los clichés del género, pero en lugar de burlarse o referenciarlos como se ha hecho mucho en sus películas contemporáneas, los abraza e intenta de encontrar alguna forma ingeniosa de desarrollarlos. Esto se lo logra principalmente a través de una dirección controlada por parte de Rugna, nunca muestra de más ni cae en la exageración, logra grandes sustos con movimientos de cámara precisos, un muy buen trabajo en la puesta en escena y el fuera de campo. También hay que destacar lo bien que utiliza la profundidad de campo a lo largo de la película, haciéndote dudar sobre las cosas que uno ve en el fondo del encuadre. Otra forma en la que la película logra escalofriarte y no darte seguridad sobre los personajes es con un guion muy bien planteado. No hay en ningún momento un protagonista único, se va cambiando el punto de vista, logrando que ningún personaje en ningún momento se sienta a salvo.

Rugna además de dirigir y escribir la película la musicalizó, logrando una banda sonora que transmite tanto terror, aventura, misterio y una atmósfera sofocante. Siguiendo con el apartado sonoro, el encargado del sonido fue Pablo Isola, quien logra hacerte dudar y aterrorizarte con una gran sonorización, con sonidos que pueden resultar conocidos pero son lo suficientemente extraños, como para identificar bien que es algo.

Lo único en lograr la atmósfera sofocante no fue la música, la dirección de fotografía de Mariano Suárez, junto a la dirección de arte de Laura Aguerrebehere provocan unos escenarios densos, sucios y agobiantes, con una paleta de colores opaca predominada por un verde amarillento y un marrón que dan una sensación de podredumbre y misticismo. La película también cuenta con unos muy buenos efectos especiales y visuales a cargo de Marcos Berta y Lionel Cornistein, que en ningún momento te sacan de la película, solo logran sumergirte más en ella.

Otra parte destacable de la película son las actuaciones, que si bien no hay alguna que individualmente destaque por sobre las demás, todas están muy bien logradas y se puede apreciar muy buena química entre los actores.

¿De verdad da tanto miedo?

En resumen, Aterrados es una película que no reinventa la rueda, pero no lo necesita, todo lo que intenta lo hace bien, y lo que intenta más que nada es asustarte y entretenerte, logrando ambas. Es una película corta, dura hora y media, en ningún momento aburre y no tiene nada que envidiarle a producciones internacionales de los grandes estudios, es de lo mejor que tuvo el cine argentino en los últimos años y particularmente en el género del terror. Mírenla y recuerden de revisar abajo de la cama y dentro del armario antes de irse a dormir.

Les dejamos el tráiler y la película se encuentra disponible en Netflix.