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Análisis de Crysis Remastered

Crysis Remastered originalmente salió al mercado el 13 de noviembre de 2007, hace 13 años, fue el juego que marcó un antes y un después en la industria, ya que con su revolucionario motor, el cryengine 2, presentaba gráficos que para la época nunca antes se habían visto, por ejemplo, destrucción ambiental casi sin precedentes, mejoras de iluminación, físicas, e incluso mecánicas adelantadas a su época.

El 18 de septiembre de 2020 nos llega su versión remasterizada, recordemos que la misma se encuentra disponible para PC, PlayStation 4, Xbox One y Nintendo Switch, este análisis se realizó en PC con una tarjeta gráfica RTX 2070.

La historia original

Para los que no tuvieron la oportunidad de jugar Crysis, aquí les hago una breve sinopsis del juego original, para que entren en contexto.

En las Islas Filipinas una expedición arqueológica descubre indicios de tecnología e inteligencia de mayor antigüedad que la presencia del hombre sobre la tierra. Por lo que el ejército norcoreano, al tanto de esta investigación y consciente de su importancia, secuestra al equipo de científicos y los retiene en un campamento en mitad de la jungla asiática. Debido a esto, el gobierno americano nos envía a nosotros a rescatar a su equipo.

Aquí es donde entra en juego nuestro personaje. Una semana después de este rapto un equipo de elite del ejército norteamericano es enviado a la zona con la intención de indagar en lo sucedido y liberar a los eruditos. Formaremos parte del comando bajo el nombre de Nomad, un miembro del equipo Raptor, este último pertenece a un escuadrón especial armado con tecnología de punta, cuenta con un nanotraje que aumenta nuestras habilidades físicas y perceptivas, además tiene camuflaje óptico y nos blinda como si fuéramos un tanque bípedo.

Todo parece ser una misión rutinaria, pero nuestro escuadrón es víctima de unos extraños objetos voladores, similares a calamares recubiertos de metal y tubos de neón azul. Hasta el momento, quedamos solamente dos miembros del escuadrón Psycho y nosotros, procedemos con la misión de rescate, durante la cual nos enteramos del origen alienígena de nuestros antagonistas, pasando los norcoreanos a ser un mal menor, ya que ellos también están siendo atacados por los extraterrestres.

Con respecto a los escenarios destacan los de mundo abierto y el sistema de cuevas alienígenas (este especialmente) pero cabe aclarar que no es un sandbox con misiones secundarias como sea la saga FarCry sino una experiencia lineal. Además contamos con la utilización de vehículos como así también tanques.

La jugabilidad de siempre

En cuanto a jugabilidad el juego presenta las mecánicas típicas de shooters, más el agregado del traje, tenemos cuatro funciones aumentadas activamente, correr muy rápido y saltar muy alto, activar el blindaje que nos va a ir consumiendo energía pasivamente y en mayor cantidad cuando recibimos impactos, el camuflaje óptico que nos hace invisibles y consume energía constantemente y a mayor velocidad mientras nos movemos, y por último el aumento de fuerza física que nos permite sacudir un tanque de una trompada.

Todas estas mejoras consumen energía, debajo de nuestra barra de vida tenemos un indicador de la misma. También tenemos las mejoras pasivas como visión nocturna, regeneración de vida fuera del combate, aislamiento térmico de avanzada, hud visual, detector de amenazas, propulsión subacuática y en gravedad 0, etc. Otra mecánica interesante en la época y hoy habitual en muchos es la de la identificación de enemigos y puntos de interés por medio de los binoculares. Además, la innovación fue la de modificar el equipamiento sobre la marcha, cambiando miras y accesorios de nuestro armamento en cualquier momento y de forma orgánica, todos estos detalles que hoy damos por garantizados en su lanzamiento original estaban sin precedentes, lo que le dio un lugar muy importante en la historia de el género, tanto como sus innovaciones gráficas.

Mejoras gráficas

La principal, y prácticamente la única, es la iluminación, gracias al RTX en gran parte, y al escalado a mayores resoluciones. No hubo actualización de gráficos ni de texturas, no hubo mejorías en cuanto al gameplay. Con respecto a los controles, se puede observar una mejoría ya que son mas cómodos e intuitivos. Lamentablemente el juego ya no es esa poderosa entrega que nadie podía jugar, el remastered presentado por Crytek nos deja con sabor a poco, aunque se agradece la llegada de esta nueva entrega para toda una generación que no pudo jugar el título, pero esta claro que no entenderán la mística que lleva este juego encima para todos los gamers de la época del primer título.

En algunos casos es muy notorio el stuttering y los tiempos de carga se hacen muy pesados, ya que cada vez que se llega a un checkpoint se freeza la imagen por alrededor de un segundo, esto con el juego instalado en un SSD, 32 GB de RAM, una 2070 súper y en otra pc corriendo también con 2080ti, en gráficos altos siempre paso.

Esta claro que los problemas son de optimización al menos en esta versión de PC que pudimos probar, y no de capacidad que le falte a las computadoras dado que el stress de CPU y GPU jamás llegó a 50% ni en el modo exclusivo de PC «Can Run it Crysis?»

Conclusión de Crysis Remastered

Si no jugaron el original y les interesa, go for it, el precio no es excesivo, tan solo esta 6 dólares en la Epic Store y es sin duda un buen título, pero si lo jugaron y están adentro por la nostalgia no lo recomendaría, tanto gráficos como jugabilidad no envejecieron muy bien, pero sus físicas siguen siendo interesantes aunque ya podemos encontrar juegos que manejan mejor esto. Esperamos que parches futuros solucionen los problemas de optimización que nos darán finalmente una experiencia mucho mas satisfactoria, por lo pronto CAMUFLAJE ACTIVADO.

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