Alfred Hitchcock es, hoy en día, uno de los cineastas más reconocidos por la industria y los fanáticos del cine. Es, podría decirse, una de las leyendas del cine que más resistencia tuvo a lo largo del tiempo, y hoy cumpliría 121 años. Por eso acá te contamos cómo llegó a ser el genio del suspenso y el misterio y qué películas de su filmografía definitivamente no podes dejar pasar si te gusta el género.
Su vida
Alfred Hitchcock nació el 13 de agosto de 1899 en Lytonstone, Inglaterra, en lo que sería la década más importante para el posterior desarrollo del cine, puesto que en esos años estaba surgiendo el mayor invento que daría inicio al séptimo arte: el cinematógrafo creado por los hermanos Lumière. En su adolescencia, le informó a sus padres que tenía intención de estudiar ingeniería. Razón por la cual no tardó en empezar sus estudios en la escuela de ingeniería de Londres, donde estudió mecánica, electricidad, acústica y navegación. Al egresarse y para servir de sustento económico para su familia, ingresó a trabajar en la compañía de cable Henley’s, donde se desempeñó como empleado técnico hasta la Primera Guerra Mundial.
Luego de la guerra, Hitchcock incursionó en la escritura creativa y comenzó a publicar cuentos propios en el periódico de Henley’s cuando la compañía lo promovió al departamento de publicidad donde escribió copias y dibujos para anuncios de cable eléctrico. Según lo que le dijo a Francois Truffault en el libro El cine según Hitchcock (una larga entrevista en donde el director francés habla con Hitchcock sobre su vida y obra), ese fue su primer acercamiento con el cine. De allí en más, empezó a fascinarse con las películas de Chaplin, David Griffith, Buster Keaton y Fritz Lang, grandes exponentes de la época.
Mientras desempeñaba su labor en Henley´s, descubrió que Paramount Pictures estaba abriendo un brazo de producción en Londres. Rápidamente, Hitchcock envió dibujos para las tarjetas de los intertítulos de la película que estaban por grabar (The Sorrows of Satan). El estudio quedó conforme con el trabajo del joven Hitchcock, por lo que decidieron contratarlo en Islington Studios en Hoxton, como diseñador de sus tarjetas. Paulatinamente comenzó a ganar experiencia como coguionista, director de arte y gerente de producción. En 1922 Paramount se retiró de Londres, así que Hitchcock fue contratado como asistente de dirección en el estudio que posteriormente sería Gainsborough Pictures. De allí en más, Hitchcock fue partícipe de una serie de sucesos afortunados que lo llevaron a dirigir su primera película en 1925 y luego su primer thriller en 1927.
A partir de ese momento, Alfred Hitchcock persiguió sus ideas y sus deseos, haciéndolos realidad en la pantalla grande y, poco a poco y película tras película, se convirtió en el indiscutido genio que hoy en día sigue acompañando a generaciones de jóvenes artistas del séptimo arte con sus producciones.
El genio del suspense
Hitchcock es conocido por películas tales como Psycho, Vertigo, Shadow of a Doubt, Rope, The Birds, Rear Window y North by Northwest, películas que no podes dejar de ver si hablamos de Hitchcock. Es imposible no encontrar en todas ellas un estilo particular, no solo a la hora de catalogar estas películas en un género en particular, sino también al momento de romper con ciertos paradigmas de la industria cinematográfica que perduran hasta el día de hoy. Hitchcock cambió, en cierta manera, la forma de hacer películas, que hasta entonces en la industria era a través de la prueba y el error.
Con relación al género, Hitchcock puso en marcha un estilo de historias de misterio que hoy en día podría considerarse tradicional. El director inglés siempre tuvo preferencia por los argumentos poco complejos, sin mucha profundidad o mensajes encriptados en su lenguaje. Esto le costó algún que otro rechazo por parte de la crítica. Pero Hitchcock consideraba crucial para el suspense realizar un entramado visual que genere intuiciones simples y que el espectador pueda captar rápidamente, sin necesidad de complejizar ningún elemento lingüístico y narrativo. La realidad es que el suspense necesita de cierta simpleza para funcionar, y eso está claro en las películas del aclamado director inglés. Hitchcock era partidario de que el suspense se crea sobre una base de recursos narrativos exclusivamente audiovisuales, sin tanta apelación a interrogantes narrativos rebuscados.
Por otro lado, el director empezó su labor en el séptimo arte con películas mudas, por lo que el pasaje al cine sonoro implicó varias cosas. Como varios de los directores de su generación, se mostró un poco disconforme con la utilización de diálogos, razón por la cual decide que una película escasa de diálogos pero en la que se entienda perfectamente el argumento si no los tuviera es el tipo de películas al que apunta. Según él, los diálogos no significan nada si todo en la imagen está predispuesto para que no lo hagan. Los diálogos quedan supeditados a las expresiones, las acciones y todo lo presentado en imágenes, utilizando la palabra únicamente para explicar algunos ribetes argumentativos complejos para entender solo con las imágenes. Fuera de ello, Hitchcock prefiere los silencios.
Otro de los aspectos con los que juega, desde luego, es con el suspenso y no la sorpresa. Hitchcock diferencia de manera muy marcada lo que significa que un hecho genere suspenso y lo que significa que, al contrario, genere sorpresa. La sorpresa es utilizada muy seguido en el cine que vemos regularmente, mientras que el suspense es una herramienta que hay que saber manejar adecuadamente. Hitchcock, para mostrar su diferencia, relata una imagen en la cual hay dos hombres sentados en la mesa de un restaurante conversando. En una de las variables, vemos a los dos comensales charlando animadamente hasta que, de repente, una bomba ubicada debajo de su mesa hace que ambos vuelen por los aires. Esa es la sorpresa. En la otra variable, el espectador primero ve la bomba debajo de la mesa, a punto de estallar en cualquier momento, y luego ve a los comensales conversando. El suspenso reside en que el espectador estará tenso, dependiente exclusivamente del momento en que la bomba explote, y no atenderá a nada más. La ubicación de las imágenes puede generar una cosa muy distinta dependiendo de dónde vayan.
El montaje fue algo muy importante para este director. En un video que presentamos a continuación, podemos ver cómo Hitchcock enseña la importancia del montaje estratégicamente ubicado. También recurre al montaje como una herramienta más para generar el clima perfecto que exige, nada más y nada menos, un thriller. Este ejemplo lo vemos en la escena en la que Norman Bates asesina a Marion en Psycho, en la que se usa una sucesión de planos breves desde ángulos inusuales para retratar la toma del crimen.
La mención de Psycho nos lleva inevitablemente al hecho de que Hitchcock asesina, en la primera media hora, a la que creíamos que era la protagonista de toda la historia, Marion. Esto fue un choque interesante en la industria en ese momento: el director pone todo el empeño en que atendamos la historia que nos plantea sobre Marion y el dinero que decide robar. Pero luego la mata. Y entonces nos quedamos sin un protagonista. El personaje principal, en ese momento, pasa a ser Norman Bates y el foco de la atención pasa totalmente de la vida que Marion estaba planeando a la vida que lleva el siniestro y extraño hotelero con su madre.
Todo esto sin contar que en Rope utiliza un plano secuencia (sin cortes) en casi toda la película. Aunque claro, hoy en día podemos pensar en Birdman o 1917 que utilizan el mismo recurso, pero ¿qué tal? Alfred Hitchcock lo puso en práctica en formato fílmico allá por 1948.
Estos aspectos y todavía más, son los que hicieron de Alfred Hitchcock la leyenda cinematográfica que es hoy y que sus métodos y sus películas trascendieran hasta ahora, sin dudas es una muestra clara de ese hecho.
Alfred Hitchcock falleció el 29 de abril de 1980, dejando un legado eterno que aún no envejece. A través de sus películas, Hitchcock nos sigue enseñando. Por eso, les dejamos acá un listado de películas que no pueden perderse de ver, si les gusta el cine, el suspense y, claro que sí, Hitchcock.
- Psycho (1960)
- Vertigo (1958)
- Rear Window (1954)
- The Birds (1963)
- The Lady Vanishes (1938)
- North by Northwest (1959)
- Shadow of a Doubt (1943)
- Rope (1948)
- Sabotage (1936)
Festejamos hoy el cumpleaños de uno de los más grandes maestros del cine, Sir Alfred Joseph Hitchcock. ¡Un grande del cine!
